Soy Inés de Priego de Córdoba y os voy a contar el día del miércoles:
Nos levantamos, desayunamos y nos ponemos la ropa de montar. Estamos cepillando y aparejando los caballos y montamos a caballo. El grupo más avanzado fue de raid, y el resto se quedo dando clase tan "tranquilamente". Luego tuvimos examen en la clase de inglés, sobre las partes del cuerpo del caballo y sacamos todos muy buenas notas.
Como era el santo de las Carmenes, y en el campamento hay dos (la gallega y la madrileña), nos fuimos a la cocina a hacer crepes y darles una sorpresa en la merienda.
En el taller de la tarde, hicimos figuritas de barro. A mí me salió una especie de renacuajo, que luego se me partió, jajaja. Despúes de merendar los crepes nos pusimos la ropa de montar. En esa hora no monté porque me dolía la espalda. Cuando montaron los grupos nos duchamos, y llegó mi HORA PREFERIDA DEL DÍA: lo de las yeguas:
Cuando metemos a Albaycín en su cuadra, hay que pasar por una corraleta de yeguas salvajes y como él no es un miembro de la manada, estas yeguas intentan morderle y hacerle cosas raras. Entonces yo voy acompañándolo diciendo: ¡¡¡¡¡YEEEEEEGUAAAAAA!!!!! para espantar a las yeguas y que nadie se acerque a Albaycín.
Cenamos perritos calientes y nos fuimos al campo a dar un paseo y ver las maravillosas vistas que hay de Granada de noche, y en el cual hubo un par de sustillos. Hay dos coches aparcados casi al llegar a la finca y Paula y Nina se separaron del grupo y dieron a escondidas golpes fuertes en estos coches, por lo que nos asustamos un "poco".
Nos pusimos el pijama, nos fuimos a la tienda y nos preparamos para dormir, no sin antes darnos una buena ronda de masajes.
Y ya está. Ea.
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